domingo, 1 de mayo de 2011

Gracias Totales!!!

Antes, yo era una persona culposa… hasta que me di cuenta que eso era algo malo y comencé a trabajarlo: psicoterapia, regresiones, búsqueda interna, reflexiones, etc. Fue un proceso bien largo.
Pero hubo un momento en sentí graduada de eso y fue cuando tuve un accidente de tráfico. Yo antes habría pensado que estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado, que quizás que karma tenía yo con la persona que me chocó y mas paja mental, pero no, esos pensamientos que antes eran automáticos en mi ya no estaban y me sentí tan liberada y feliz.
Agradecí el momento –el accidente- porque me demostraba que era verdad que había superado la culpa, que no sólo era a nivel mental y teórico mi trabajo, sino que lo había integrado mi espíritu.
Luego de eso no quise dormirme en los laureles, comencé a trabajar el perdón y la compasión… Como tengo una vida linda y sin mayores tribulaciones es fácil sentir eso cuando lo que lo despierta te es lejano y no te implica directamente.
Pero hace poco fui calumniada, juzgada y condenada… lo sentí como una injusticia, me dolió… No me nació defenderme, entrar en conflicto… Simplemente me fui enfocando en otras áreas dejando atrás el episodio… Hasta que alguien –no directamente implicado- me llamó para pedirme disculpas por aquel suceso, cosa que no esperaba.
Junto con perdonar, sentí admiración por quien se disculpaba, ya que se que eso implica humildad. Y fui consciente de que si bien había superado aquello, no lo había perdonado, porque me sentí liviana, tranquila y reconocida.
Además me pidieron volver, eso me lo pensé unos días… hasta que me di cuenta de que el último argumento para no hacerlo era el orgullo, busqué esa emoción en mi y no la hallé, así que fácil, vuelvo.
Aun no me sentía del todo bien, hasta que me encontré frente a frente a una de las personas que me prejuzgó. Igual fue tenso el momento, me sentí mal un rato, luego tuve necesidad de desahogarme y tuve a mi lado una amiga amorosa que me escuchó y luego el hombro de mi pareja donde terminé llorando.
De pronto el sentimiento de víctima de una injusticia cambió… y se volvió agradecimiento…
Les doy las gracias a estas personas por ponerme en una situación que me sirvió para probar que aprendí a perdonar y ser humilde… Además, porque estoy sintiendo una compasión que nunca había sentido y es tan linda.
Perdoné luego de me pidieran disculpas, lo que se agradece y mucho, obvio, pero también me doy cuenta de que si hubiese perdonado antes me habría ahorrado meses de sentirme fatal.
Ayer se cerró un capitulo de mi vida, y la lección aprendida es maravillosa, gracias a todos los que colaboraron el ella en los distintos roles, gracias totales.