lunes, 22 de noviembre de 2010

El tiempo...



Como algunos ya saben, estoy en el taller Un Curso de Milagros… y mi primera tarea fue conversar con el tiempo.

Regresando una noche a mi casa escuchaba a Jorge Drexler en el auto y la frase de Lavoisier “nada se pierde, todo se transforma” que él ocupa en una de sus canciones, me hizo llegar a escribir.

Intenté imaginar una cita con el dios Cronos, pero una voz me dijo: si ya has visto el tiempo, di lo que viste y comencé a escribir. Al releerme me sorprendo, no me creía capaz de expresarlo de esa forma, cuando lo que yo veo son múltiples colores danzando formando espirales y otras formas psicodélicas, pero en cuanto enfoco algún punto, aparece la complejidad del mismo y en él vidas como las nuestras.

Ahora veo que puedo transmitir verbalmente ese entramado de no se como decirlo, serpientes danzantes hechas de fotogramas colorinches multidimensionales que se entrecruzan creando nuevas formas y que hasta ahora para mí era sólo un espectáculo maravilloso que contemplar.

La guía me pidió cambiar la redacción de este texto, porque es impersonal y no se me ve directamente implicada, pero al transcribirlo no salió, sino que lo copié tal cual fue inspirado. Lo que pasa es que cuando tengo este tipo de vivencias mi personalidad se diluye y salió así. Veremos más adelante que pasa, ya que esta fue la primera vez que transcribo una lección aprendida de esta forma. Y bueno, para implicarme en el escrito y asumirlo mío sin cambiarlo es que hice esta introducción.



Cita con el tiempo:

Al sentirme fluir me doy cuenta de que lo que normalmente vemos como realidad es solo una faceta de infinitos enfoques.

Nuestro mundo es energía en constante movimiento. Este tiene cambios de ritmo para así crear las formas, puestos que estas son tan sólo resonancias.
Nuestra conciencia debe recorrer este entramado de todas las posibilidades del mundo a fin de conocerlo y vivenciarlo.

En el proceso de creación de las formas hay zonas donde la energía fluye de marera más compleja a distintas vibraciones y se expresan las curvas, relieves e imbricaciones y otras más simples que nos muestran zonas planas.

De no existir estos cambios, es decir, se mantuviera la regularidad en la vibración del universo, este no tendría formas y por tanto no existiría la realidad material en la que estamos.
Lo que pasa es que a veces nos sentimos cómodos en cierta vibración y va bien mientras sea la que nos corresponde. Pero cuando viene el cambio, si nos resistimos a dejarla el desencaje nos causa dolor y creemos que es nostalgia y con ello justificamos nuestro apego vistiéndolo de sentimiento.

O que una situación ya nos parece aburrida y queremos rápidamente abandonarla y ante ello algunos optan por cambiar de rumbo y otros por amargarse mientras lo asumen como una carga.

Pero si se dieran cuenta que ese momento -que es como un fotograma- no es su realidad… que lo que están persibiendo como realidad no es más que un momento… Y no sólo eso, sino que ese momento está enfocado desde su propio punto particular de vista, que es uno más entre infinitos posibles.

Y qué es el tiempo?
-La secuencia entre momentos. Lo que da continuidad a la trama, el soporte energético con que se teje la realidad.

Tendremos que recorrerlo mientras estemos en este mundo, porque sino nos estancamos y estancamos al mundo.

Por qué este mundo es tan complejo? Por qué tanta contradicción?
-Porque es un experimento y puede ser mejor.

Es un experimento con muchas variables intencionalmente aleatorias. Es un experimento entre muchos que busca nuevas expresiones… por ello tanto ajuste y corrección.
Puede ser mejor… aunque todos somos la mejor versión de nosotros mismos que podemos ser, aunque a nuestros ojos esto no baste y no podamos apreciarlo. Algunas personas al ser muy básicas no ven opciones de ser mejor y a otros nos parece difícil de aceptar que haya gente básica que es ciega a cosas que nosotros vemos.

Hay momento en que se nos abren puertas y podemos cambiar de rumbo sin desgaste porque corresponde hacerlo o se presenta la opción. Y porque si todos pasamos cierta etapa, entramos en una nueva con otros aprendizajes.

En fin, a recorrer este mundo que es un experimento, es decir un aprendizaje, que se recorre de momento en momento secuenciando lo que llamamos tiempo, aunque esto parezca olvidado.

Hay tantas cosas de nuestra vida que pueden ser deducidas de ello…