viernes, 29 de mayo de 2009

Por qué somos como somos?


Desde muy chica me di cuenta
que uno era de una forma,
pero habían otros ideales que uno podía ser.
Mi madre siempre decía que quería criar damiselas
y me lo enrostraba cada vez que mi comportamiento
se alejaba se ese ideal… lo que sucedía casi todo el tiempo.
A los cinco años la palabra damisela ya me sonaba cursi,
pero igual quería agradar a mi madre.
Tratando de complacerla fue que aprendí
a sentarme con las piernas juntas,
no poner los codos sobre la mesa,
pedir permiso y dar las gracias.

Yo miraba (y admiraba) a la Vivi,
que era la hija de una amiga de mi mamá
y la encontraba tan perfecta:
era linda, buena alumna, andaba siempre impecable
(lo que era difícil viviendo en el campo)
y más encima simpática y autentica
que eran las virtudes que yo más valoraba.
Porque cachaba que por ahí había mucha mosca muerta
que se hacían las santitas
pero estaban llenas de infantiles bajas pasiones,
es decir, eran mentirosas, envidiosas y conventilleras…
pero la Vivi no, ella no posaba de nada,
era la niñita ideal de verdad
y yo en lo único que me le parecía
era en la honestidad.

Estudié la básica en una escuela de monjas de puras niñitas,
en donde destaqué por poner buenos motes,
reírme fuerte y desordenar al curso.
Tenía buenas notas, pero nunca me alcanzó para ser de las mateas.
Allí cada vez que había una presentación
las niñitas rubias actuaban como tales
y las morochas teníamos que disfrazarnos de hombre.
Me toco ser huaso en todos los bailes,
marinero de la Esmeralda,
y Bernardo O’higgins con barba y brazo quebrado.
nunca me enrolló esto y no podría decir que influyó
en mi escaso desarrollo de lo femenino
y mi inseguridad frente al sexo opuesto.

La verdad en el fondo me daba todo lo mismo…
lo único que siempre me importó fue poder expresarme libremente
y si ahora escribo de esto es porque estoy enrollada
con saber qué es lo que hace que seamos como somos.
Definitivamente mi personalidad venía de fábrica
y bien poco se logró con en el pulido para habilitarla socialmente.

Mmmmm, si hasta quiero experimentar
eso de ser diferente si es que se puede…
Estaré muy loca?

11 comentarios:

Víctor Hugo dijo...

mmm ... hay que ser autenticamente como uno es no mas poh.... ahora... no se te vaya a estar dando vuelta el paraguas po.. jajajaja!

un abrazo
VH

El Oscar dijo...

Lo importante es querenos,el resto ...pamplinas

Anónimo dijo...

VH... no se me da vuelta el paraguas, ni siquiera se me había ocurrido. Soy demasiado estrogenada para poder hacerlo.

Oscar... si, pero me enrollé con el porque de ello.

El Oscar dijo...

Si no fuésemos lo que somos...jamás seríamos.Saludos

Claudia Corazón Feliz dijo...

También me he preguntado lo mesmo algunas veces. Y mi mamá también quizo que yo fuera una lady di chica, jamás le resultó.

Nos contai cómo te jue en la búsqueda.

Jonathan Coreas dijo...

nuestros padres siempre tratan de formanos de acuerdo a sus ideas.

Anaís Sandiego dijo...

No, no estás loca Laura. Al menos no más que todos. Nuestra historia de vida nos marca muchísimo y nos moldea, pero la materia prima viene de fábrica.

Me gustó mucho el relato de tu infancia... Me sentí muy identificada cuando contabas que tu mamá buscaba que fueras una damisela.

Abrazos.

Anaís S.

Daniel. Te invito a visitar http://eldeportero.wordpress.com dijo...

Para mi lo importante es ser uno mismo, jugarsela por lo que uno quiere, y evitar dañar a otra gente.
Saludos

Bandolera dijo...

lo importante es que lograste ser feliz y cero rollo...bien!
Sldos

franco ferreira dijo...

loca por eso? para nada. De hecho lo encuentro sumamente sano. Y la experimentación al respecto también lo es.
cada uno es de una forma, pero vale la pena probar otras, no?
Dale, vuélate. me gustó el desafío.
Cuídate mucho, estamos al habla ;)

Ipnauj dijo...

Cuando somos unos bebés, sin que nadie se de cuenta, alguien se acerca a nosotros, muchas veces es un desconocido, casi siempre, un anciano y sopla en nuestra oreja izquierda y nos inyecta nuestro plan de vida.

Un gran saludo.